Sigo viva

¡Estoy aquí! No he actualizado por varias razones, la más importante porque estoy estudiando, que es bastante loable. Yo lo loo, tú lo loas, otros lo lailan. Sí, es un chiste muy malo pero a mi me hace gracia, ¡que pasa!. Últimamente estoy de lo más irascible, y eso que no me he peleado con nadie (todavía), pero esta situación estudiantil, con mucha pereza y como consecuencia sentimiento de culpabilidad está acabando conmigo. Si un día no estudio pues al siguiente me pego un empacho de noche entera, libros, una cajetilla entera de tabaco y 3 cafés solos. Y claro a la mañana, o tarde, siguiente me levanto al borde del infarto, dolores de pecho y la cabeza que parece que me va a estallar. Pero bueno, ésto acabará para bien o para mal dentro de un mes.
Si es que yo nací vaga, me cuesta estudiar, me cuesta hasta levantarme del sillón... que le vamos a hacer. Está claro que del cielo no me va a caer nada, pero es increíble la rapidez con la que a mi cabeza se le olvida esta bonita afirmación.
Por lo demás todo sigue igual, o más tranquilo. Hago vida familiar más bien poca, porque todavía no he visitado a mi padre (cosa que a él se la sopla), ni a mis abuelas, tíos, primos... He de reconocer que me he vuelto un poco antisocial. Y de lo otro, entiéndase rollo sentimentaloide, pues ná de ná, y ya ni ganas, al menos con el que las tenía, porque mira que es pavo. Y para eso me voy a Brighton otra vez, o que se vaya él que con estos grados de paverío estaría en su salsa. Además, alguien que oye como estamos discutiendo sobre Rolling vs Beatles y nos llama freakies, definitivamente no es bueno para mi salud mental. Ya he tenido bastantes de esos en mi vida. Así que mucho mejor seguir discutiendo y emborrachándome con los colegas, ¡no hay color!.
Bueno amigos, hasta aquí mi crónica casi mensual. No hay mucho que contar pero confío en que de aquí a final de mes habrán novedades. ¡Hasta la próxima!