Todo lo bueno se acaba

Son las 7 de la mañana, ya está amaneciendo y yo todavía no puedo enfrentarme al hecho de que hoy voy a pasar muucho frio en mi cama extra- grande porque mis amigos ya no van a dormir en ella (sí, dormíamos los tres juntos). Así que me he puesto a actualizar mi blog, mientras me voy haciendo a la idea de que mañana (hoy) volveré a mi rutina de búsqueda de curro.

Estos días han sido los mejores desde que he llegado a Brighton, sobre todo porque me he sentido muy protegida, arropada y sobre todo querida; pero es lo que tiene la independencia radical: consideras algunos puntos, más que nada los buenos, y los malos van llegando por el camino y los tienes que aceptar igualmente, y eso incluye el darte cuenta de que tienes lejos a los que más quieres. Quizás haya gente que no comprenda este tipo de amistad; yo nunca he tenido hermanos, a lo mejor tiene que ver con eso, o con el hecho de que nos conocemos desde hace nueve años y siempre SIEMPRE han estado ahí, para lo bueno y lo más malo; y sobre todo, son las personas con las que he vivido mis mejores momentos (sin duda). El caso es que ya los echo de menos.

Estas son algunas fotos de esta semana:

Hay una bandada de pájaros indeterminados que aparecen de vez en cuando por el Pier y comienzan a volar alrededor tuyo dibujando formas increíbles en el aire. Yo solo los he visto dos veces: mi primer día en la ciudad y el primer día en la ciudad de mis amigos.

Lolita es adicta a las compras (yo también lo seré cuando tenga curro), y se compró unas All Stars guapiiiiiiisisisimas!!

En un viaje es lógico que se te olvide algo... y entre este basurero no me extrañaría nada!! Volverá a su estado normal, lo prometo. Y el gato aprovecha cualquier ocasión para echarse en mi cama, no es listo ni na'...