Just a little help

¡Que buenos son mis padres!. He hablado con ellos hoy: mi madre me manda 300 euros y mi padre el dinero del alquiler, yujuuuu!. Parece un pastón aunque solo me desahogará un mes, pero lo que cuenta es lo bien que se lo han tomado. Yo, como nunca me había visto en esta situación, me imaginaba unas conversaciones traumáticas con lágrimas, sermones y muchos: "Pero que haces ahí tú sola, vuelve a casa". Pero no, he de admitir que tengo unos padres geniales. Sin embargo, no puedo alegrarme y quedarme sentada en casa. Sigo con mi búsqueda de curro que ya ha empezado a dar sus frutos: El lunes tuve una entrevista de trabajo y el viernes tengo otra, ojalá pronto pueda decir que vengo muerta del trabajo. ¡Que paradoja! Cuando pensamos en una vida rutinaria normalmente pensamos en el trabajo que tenemos, lo aburrido que es.., pero cuando decidimos cambiar nuestras vidas lo que más deseamos es volver a esa rutina, porque al fin y al cabo es lo que nos permite vivir como queremos (aunque nos quite unas horas de vida personal al dia).

Entre curriculum y curriculum tambien tiene que haber momento para la fiesta, y ésta fue el lunes. En principio quedamos Chispa, mi Primo, Ketamine, Nau y yo para tomar una cerveza en una disco, y nos animamos tanto que la fiesta terminó en mi casa, bailando encima de las mesas y con tres chicos que conocimos en la discoteca, pero no penséis mal, que no hubo intenciones sexuales, al menos por mi parte. El domingo es la Wild Fruit, es una vez al mes, y en esta ocasión va de Drag Queens, así que ya hemos quedado para disfrazarnos y salir a la fiesta.

Y ahora que ya os he puesto al dia, cruzad los dedos y rezad todo lo que sepáis para que la próxima vez que escriba tenga un trabajo. Muchas gracias.

Con esto en la cabeza, la vida se ve desde otro prisma

Arrasamos con la cesta de los condones de la discoteca (más vale estar preparado).