Rockeras

Tipas duras. Nos enfrentamos a la vida con dos cojones y sin vacilar. Si hay que llorar procuramos que nadie nos vea. Eso SÍ es ser rockero. Como una roca.

Que el título no les engañe, hoy no voy a hablar de mis continuas pajas sentimentales. Hoy me siento especialmente orgullosa de mi misma, casi tanto como cuando llegué aquí.

El miércoles que viene dejo mi trabajo y ahora mismo estoy contando las horas. Estaba harta de esa tienda espeluznante donde todo el mundo se pasa por el forro de los cojones la disciplina, muchos con el beneplácito de supervisores y manager. Por supuesto yo no iba a ser menos, cuando ves como todos, desde staff hasta managers, llegaban tarde, llamaban enfermos para no ir a currar habiendo estado la noche anterior de fiesta con ellos.. no soy una persona puntual, siempre se me olvida algo en el último minuto y me suelo quedar dormida, así que suelo llegar cinco minutos tarde. Cosillas que si vienen de una enana italiana o de un tiarrón encantador de serpientes vale, pero si lo hace la curranta de turno, la que se puede quedar media hora más para cuadrar cajas o no se queja si tiene que cerrar y después abrir la tienda a las 6 de la mañana, hay que meterla en vereda. Y eso no, encima de puta, apaleada, me niego.

Esta mañana llegué 10 minutos tarde (me quedé sobada). Y mis dos managers, el italiano cagona y el inglés prepotente, quisieron hacer de mí la cabeza de turco de un castigo ejemplar, como el staff se les ha subido a la chepa que da gusto... Me hicieron una "investigación", donde preguntaban y anotaban todo lo dicho, como si estuvieramos en una comisaría. Si hubiera robado dinero o comida, como hacen casi todos los supervisores, me callo, pero por esta tontería? Me descojono en tu cara. Cuando acabamos me anunciaron que al día siguiente tendría otra disciplinary interview con alguien del head office y que mi comportamiento era intolerable. Pregunté si por esto me podían echar. Sí. Flipante.

Así que esperé a que llegara mi descanso para llamar a Miprimo y preguntarle cómo se escribe una carta de notice. Aquí estas cartas son obligatorias, y el aviso de que te vas en mi curro es de una semana. Allí mismo la escribí y se la dí en el despacho mientras comprobaba con satisfacción sus caras de sorpresa. Y es que para las navidades por supuesto contaban conmigo ya que, entre vacaciones dadas en regla y otras extras que no correspondían pero se dieron igualmente a los de siempre, se quedan cortos de personal. Pues hala majo! Cada uno a cobrar en una caja en Nochevieja porque la que está aquí se las pira, y no veas lo bien que me ha sentado. Que liberación.

...To me, baby, uh uh uh uh... Llega un tarareo a mi mente cuando menos me lo espero que hace que evoque ciertas imágenes que me impiden concentrarme, y unos gestos, y unas voces.. QUITA BICHO!!! Esta alterfugi siempre se mete donde no la llaman. Fuerza. Relativicemos. Necesito unas vacaciones fuera de este micromundo.