Life is a Cabaret

lafugitivaebria@yahoo.es

lunes, abril 10, 2006

Fin de semana movidito


Este fin de semana no he parado. El Sábado se presentó como un día tranquilito: trabajar a las 6.30 de la mañana, volver a casa, descansar y prepararme para la minifiesta en casa de E. (mi compañera y cada vez más amiga que es venezolana). Pero cuando ya estaba acabando mi jornada laboral ¡Horror!! En mi caja faltaban 30 libras. Y no es la primera vez que pasaba, y yo, aunque no me crean, soy muy honrada y además cuando trabajaba en España siempre me cuadraban las cajas. Encima te hacen firmar un papelito en el que aceptas que es tu responsabilidad o algo así, aunque todos allí sepamos que son los supervisores los que traen cambio y eso.. vamos que a lo mejor no es un error tuyo. Me fui del curro pensando que me iban a echar, y encima en la tienda las cosas no andan muy bien para pagar a tanto personal así que pueden entender mi acojone. Tiré directamente para el banco a pata, en plan vagabunda, con mi abrigo negro, pelo arrebujao del viento y sorbiendome los mocos cuando se me ocurrió mandarle un sms a E. para esperarla cuando saliera del curro y poder desahogarme con alguien que hablara mi mismo idioma y que supiera de lo que estaba hablando. Nos fuimos a comer a un chino (dios, como necesitaba comida que no hubiera cocinado yo misma), y entre pitos y flautas y una buena noticia: el dinero lo había extraviado un supervisor y había terminado en otra caja; llegué a mi casa a las 7 de la tarde. Y me eché a dormir 10 minutos.
Hasta que sonó el teléfono. Era E., que cancelaba la fiesta porque estaba muy cansada, y yo, que soy una inconsciente!! en vez de aprovechar para descansar y dormir por todas las semanas atrasadas que el domingo tenía libre, le mandé un sms a otra compañera que también iba a la fiesta (D. una niña polaca) para ver si nos íbamos a tomar algo. Cuando llegué al pub no solo estaba D., sino mis compañeras K. inglesa y K. polaca y su compañera de piso. Total: varias pintas y del pub a la discoteca, de la discoteca al fish and chips y de alli a casa de la K polaca a sobar que D. y yo vivimos a una considerable distancia como para recorrerla a esas horas a pata y borracha. Dios mio, la casa de K. es un bedsit, algo como una habitacion con cocina incorporada y baño comunitario a mitad de la escalera. Y una cama doble..para cuatro. Nuestra imagen era la mejor definición de la expresión "lata de sardinas", pero estábamos tan cansadas.. que al menos yo dormí como una marmota.
D, K, su compañera de piso
y yo durmiendo

Al día siguiente, cuando debería de haberme ido a mi casa para limpiar mi habitación, poner una lavadora con mi uniforme y demás, mi sentido de la responsabilidad se ausentó una vez más y nos quedamos allí cocinando y viendo paridas de internet. Y para rematar se nos ocurrió la genial idea de comer con vino, como buena tradición española, y de terminar con chupitos de vodka y un licor raro, como buena tradición polaca. Y a estas demostraciones internacionales las siguieron varias copas de vodka con cocacola, vulgaridades varias, y conversaciones de política y la situación polaca actual mezcladas con burlas de los compañeros de trabajo (dibujos incluidos).
Llegué a mi casa anoche a las 10, con un dolor de cabeza terrible y el uniforme esperando para ser lavado. Me acosté a las 11 y he dormido más de 12 horas, por fin la cura de sueño que tanto merecía.
Y ahora el segundo capítulo de mis post atrasados:

¡El ataque de los babosos asesinos! (chanchanchan...)
Hace dos domingos me tocó turno de tarde en la tienda, con tres pakistaníes por compañeros. La tarde empezó tranquila, hablando en la caja con el más pureta de ellos, que tiene pinta de padre de familia responsable y buena persona, hasta que me pidio el número de teléfono.. QUÉ?? sí, sí, ya te lo daré un día.. y empecé a pensar.. ay mi madre la tarde que me espera.. y no me equivoqué. El segundo de ellos ya lo conocía, me había tocado una tarde en la caja con él y había terminado de los nervios porque es de estos típicos que se creen que son graciosos y además que así ligan, y son unos pesaaaos hasta llegar al límite. Y este día no decepcionó a su público: bromas varias, que si no te dejo salir de la caja, que si le tienes que sonreir al cliente, que que acento tan raro tienes.. hasta que ya no pude más, paré la cola de clientes que tenía delante mia y le dije: YOU ARE NOT FUNNY AT ALL!!! SHUT UP!! y me puse roja como un tomate. Al tercer especimen no lo conocía, y ni siquiera se presentó, lo único que hacía era mirarme de arriba a abajo con cara de culo y mirar al otro (al payaso) y reírse. ¡Hasta en un momento lo pillé imitándome!.
Por favor, imaginad 8 desesperantes horas así, intentando estar sola y entretenerme ordenando la comida por fechas y demás tareas estúpidas, mientras aquellos tres me miraban desde la caja y se reían. El payaso se me acercó a pedirme perdón y yo le dije que sí, que lo único que quería en ese momento era estar sola, y el tío se da la vuelta, se va para la caja todo descojonado y se pone a hablar en su idioma con los colegas.. y otra vez a mirarme (según la teoría de MrI estaban diciendo: "pero que le pasa a la putita esta...") de esa manera que incomoda tanto porque parece que te están viendo desnuda.. fue horrible.
Al día siguiente hablé con E., quien me dijo que no era la primera que tenía problemas con ellos y que lo mejor que podía hacer era poner una queja para que no me tocara otra vez con ellos. Y así lo hice, hablé con K. polaca, que está en el entrenamiento de supervisora y ella habló con los jefes, y hablaron conmigo para decirme que no tenía de que preocuparme, que no me iba a tocar mas con ellos y que si alguno se pasaba otra vez conmigo que les iban a poner las cosas claras.
Ja! Con Lafugi no se juega!!