Life is a Cabaret

lafugitivaebria@yahoo.es

miércoles, septiembre 26, 2007

Ultimas noticias

Sigo viva. Desde hace dos semanas estoy currando de dependienta en esos grandes almacenes que ahora mismo todos tendrán en mente. Quien me ha visto y quien me ve, milagro que me hayan contratado con un piercing en la nariz... eso porque no me han visto el tatuaje. En fin, no es el trabajo de mis sueños y estoy quemada como una perra pero al menos tengo dinero a final de mes, y eso es mucho, ya era hora. Así que entre vajillas y cristalerías voy enervandome con clientes pesados y pasando el rato. He descubierto que hay algo peor que los Cuarenta Criminales de Mara Jade (que yo los oigo de vez en cuando, pero no soporto los putos 40Latino): el hilo musical. Es tremendo. Es matador. Y tiene un anuncio del asqueroso de Melendi cada cinco minutos con la cancioncita del futbol!! Muy mal. Pero ya puedo contratar Ono, al fin!!!
En otro orden de cosas mi tía me ha regalado un Ipod mini. Ole, ole y ole! Estoy más contenta que unas castañuelas, tanto que anoche me pegué hasta las 4 metiendo musiquilla.
Y hasta aquí mi crónica de novedades. Hasta pronto!

martes, septiembre 11, 2007

Tu me llamas, amor

Tú me llamas, amor, yo cojo un taxi,
cruzo la desmedida realidad
de febrero por verte,
el mundo transitorio que me ofrece
un asiento de atrás,
su refugiada bóveda de sueños,
luces intermitentes como conversaciones,
letreros encendidos en la brisa,
que no son el destino,
pero que están escritos encima de nosotros.

Ya sé que tus palabras no tendrán
ese tono lujoso, que los aires
inquietos de tu pelo
guardarán la nostalgia artificial
del sótano sin luz donde me esperas,
y que, por fin, mañana
al despertarte,
entre olvidos a medias y detalles
sacados de contexto,
tendrás piedad o miedo de ti misma,
vergüenza o dignidad, incertidumbre
y acaso el lujurioso malestar,
el golpe que nos dejan
las historias contadas una noche de insomnio.

Pero también sabemos que sería
peor y más costoso
llevárselas a casa, no esconder su cadáver
en el humo de un bar.

Yo vengo sin idiomas desde mi soledad,
y sin idiomas voy hacia la tuya.
No hay nada que decir,
pero supongo
que hablaremos desnudos sobre esto,
algo después, quitándole importancia,
avivando los ritmos del pasado,
las cosas que están lejos
y que ya no nos duelen.

Y por eso y mucho más te quiero.

sábado, septiembre 08, 2007

Aves de paso

... Y de hecho, fue un Gran Día. Uno de los mejores, si no el mejor, concierto que he vivido. Fue increíble ver a esos dos grandes, cantautores, músicos y "emocionadores" profesionales encima del escenario y además juntos. Voy a ser sincera: yo, orgullosa de mi condición popera, siempre había renegado de Sabina, aunque, como todos, conocía algunas canciones, más en la voz de mi padre que en la suya propia. A Serrat lo tenía en mi memoria infantil debido a mis tías y su época progre. Así que en estos últimos días y con alguna ayuda, rescaté mis pobres recuerdos olvidados y los completé con algunos cds. Y por supuesto me enganché. Si hubiera hecho caso antes a Almu, ésto no me hubiese pasado. Pero nunca es tarde para reconocer la buena música, he de admitirlo.
De camino al concierto estaba con un nudo en la barriga. Sentía que iba a pasarme algo importante, algo parecido a ser testigo de un trocito de historia. Y así fue. Las luces se apagaron y comenzó "Hoy puede ser un gran día", una de mis canciones favoritas de Serrat, a conjunto con "Ocupen su localidad". Y de ahí al final, como en un viaje. Aunque algunos no estaban muy animados, supongo que por la diferencia de generaciones allí reunidas, nosotros nos lo pasamos pipa. No nos daban tiempo de reponernos de la emoción de "Es Caprichoso El Azar", para pasar a los gritos y saltos con "Pacto entre Caballeros".
Cuando Serrat, el cual se salió con la voz, cantó "Cantares" creó tal momento de emoción al recitar, que alguna lágrima se me cayó. Quizás por pensar, probablemente fui la única al tener dicha ocurrencia, que tanta gente ha podido entonarla a modo de protesta, de lucha, en otros tiempos, fue casi como compartirlo... Vaya cursilada, pero así fue, y yo lo cuento, ¿qué pasa?.


Mi favorita de Sabina, también en el concierto, fue "Calle Melancolía". A guitarra. Para mí, el momento más bonito, y sí también moqueé, una que es de lágrima fácil. Solo una pega, que no cantó "Peces de Ciudad" (también eché de menos "Donde habita el olvido"). Sé que no es de las más conocidas ni de las mejores, pero a mi me trae muy buenos recuerdos... y sé que en otros sitios la ha tocado!!
Para los saltos y las palmas: "19 días y 500 noches", "Princesa" que fue un desfase y "La del Pirata Cojo". Y encima se marcaron una rumbita con "El Muerto Vivo" de Peret, con bailoteo incluido.
Total, dos horitas y media que se me hicieron cortísimas, y que me han dejado con un dolor de espalda tremendo, pero que me ha valido la pena. Lo repetiría hoy mismo.
No puedo dejar testimonio gráfico debido a que mi estupendo movil nuevo, no viene con accesorios para pasar las fotos (y vídeo) al ordenador. Hay que joderse!!!! Pero cuando lo consiga las colgaré, eso sin duda.
Hasta aquí mi crónica de uno de los mejores días de mi vida. Buenas noches.

Escuchando: "Y sin embargo" Joaquín Sabina

jueves, septiembre 06, 2007

Hoy puede ser un gran día

Me queda una hora y media para prepararme y salir de mi casa. Tres horas y media para el concierto y ya está bien de psicoanálisis por hoy.


Hoy puede ser un gran día, duro con él!!

lunes, septiembre 03, 2007

Me gusta la mañana, me gustas tú!!

No me puedo quejar. No sé porqué estoy en uno de esos momento en los que la gente, especialmente la que quiero, se porta bien conmigo. Me siento mimada, y eso me gusta. Me pone de buen humor y, aunque siga sin curro, me anima emocionalmente y me da fuerzas.

El viernes Loli y yo quedamos para mirar unas lanas destinadas a unas manoplas rollingstoneras que me pienso hacer. Después nos fuimos a ese bar de siempre a tomarnos las cervezas que hacía tiempo no tomábamos y a reirnos de cosas como ésta.

El sábado noche y domingo me fui a casa de mi padre, ese remanso de paz en el que duermo como una bendita y del que, aunque no haga un sol picón, vuelvo con la nariz y los mofletes rojos. Bego me regaló una camiseta que hace tiempo quería tener, hecha con sus manos de experta en el patchwork, como muchos ya sabrán.

A que mola!!!

También me proveyeron con alimentos sanos, que buena falta hacen en mi cocina, porque esto de vivir sola y ser vaga es igual a congelados:

Ciruelitas ricas y, sí amigos, eso son calabacinos, dignos del Increíble Hulk por lo menos. La panzada que me voy a dar...

En fin, que este fin de semana ha sido completo y alegre, y como dicen que la felicidad no existe si no que se compone de momentos felices... pues eso. Lo más, escuchar a mi padre tocar a Sabina. Hacía mucho tiempo que no lo oía tocar la guitarra.